lunes, 18 de octubre de 2010

17 DE OCTUBRE DE 1945 "PIEDRA FUNDACIONAL DE LA DIGNIDAD NACIONAL"

Un día como hoy, hace 65 años, el clamor del pueblo hizo posible la liberación de Juan Domingo Perón, fundamentado en el fervor y lealtad de los sectores populares, quienes no se retiraron de la Plaza de Mayo hasta ver libre a quien se transformó en su líder político. Hoy queremos hacer un ejercicio de memoria y recordar algunas decisiones trascendentes del primer peronismo, entre ellas la política industrializadora, la creación del IAPI y la Ley de Bancos. La nacionalización de los Ferrocarriles, la política de fortalecimiento de empresas de servicios como Gas del Estado, Agua y Energía y Obras Sanitarias, la creación de la Flota y Astilleros del Estado, el impulso a Aerolíneas Argentinas y la Fábrica Militar de Aviones con su hermana IME (Industria Mecánica del Estado) como así también los proyectos de desarrollo nuclear. No podemos dejar de destacar las numerosas leyes obreras y sociales protectoras de la dignidad del trabajador ni, fundamentalmente, la construcción del Estado de Bienestar, plasmado en la Constitución de 1949. El Movimiento Nacional y Popular se conformó en base a una estrategia que permitió al peronismo la redistribución de la riqueza con justicia social y la inclusión de los sectores populares en la toma de decisiones políticas, económicas y sociales.



Por aquellas medidas Perón fue acusado de fascista por los sectores del libre mercado y los representantes de las potencias financieras. Sus socios locales, la oligarquía y los sectores del privilegio, pretendían mantener un país para pocos, marginando a los sectores populares que, con el peronismo, surgieron a la vida política nacional. La política de Perón fue reconocida como auténticamente latinoamericana, con un Estado con fuerte presencia y articulador del desarrollo nacional capitalista independiente.

Esta construcción política y social fue desguazada por los sucesivos gobiernos de facto, la dictadura militar genocida y el neoliberalismo de los ’90.

Esta discusión, que hoy, con el paso del tiempo, tenemos que actualizar, no está zanjada. Después de la desarticulación del Estado de Bienestar, algunos dirigentes partidarios coincidentes con cierta oposición (la del Frente del Rechazo), cuestionan la reestatización de Aerolíneas Argentinas, de la Fabrica Militar de Aviones de Córdoba y del Sistema Jubilatorio, como así también la sanción de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual y la recuperación del Banco Central, en general, las políticas públicas de recuperación del Estado y la dignidad nacional. Políticas de inclusión y desarrollo autónomo. La cuestión, entonces, es discutir que nación queremos construir de cara al nuevo siglo y los desafíos que este mundo globalizado nos propone, apelando a nuestros fundamentos históricos, sin que estos se vuelvan mera memoria nostálgica.

En este 17 de octubre, en este Día de la Lealtad, queremos reconocer y que se reconozcan en Perón, en Evita y en los miles de comprometidos compañeros, el protagonismo que alcanzaron para construir y sentar las bases de un modelo argentino en defensa de la soberanía nacional, la justicia social y la independencia económica, en un contexto de integración latinoamericana.

Por ello creemos importante rescatar la movilización popular del 17 de octubre como un mojón fundamental en la lucha por una nación libre, justa y soberana, piedra fundacional de la dignidad nacional. Una lucha que debemos tener presente cada día frente a quienes pretender volver al poder para hacernos retomar la senda del Estado atado de manos, preso de las corporaciones y de los poderes de siempre, de los que siguen creyendo ser los dueños del destino de la Argentina.

Creemos que es posible construir una nación solidaria, integradora y más justa. Un país verdaderamente latinoamericano que comparte un sueño continental. Un territorio que reconoce a cada uno de nosotros como sujetos de derecho y merecedores de ser parte de esa construcción.

Por eso en este día, más que nunca, desde el ¨subsuelo de la patria sublevado¨ de ese octubre que hizo nacer a este movimiento nacional y popular hasta estos días en que la patria cumple doscientos años con un gobierno de dignidad nacional, reafirmamos nuestra voluntad de seguir trabajando firmemente y codo a codo con quienes quieren una nación libre, justa y soberana.

                                                                                      Concepción del Uruguay, 17 de octubre de 2010.-





        Ricardo Rodríguez – Horacio Costantini – Carlos Pérez – David Rodríguez – Luis Cerrudo –
           Carla Malugani – Ramón Cieri – Graciela Guerrero – Horacio Landini – Mario Lovisa.

sábado, 9 de octubre de 2010

A un año más del natalicio del General Juan Domingo Perón por el Prof. Ramón Enrique Cieri.


El 8 de octubre de 1.895, nace en Lobos, Provincia de Buenos Aires, Juan Domingo Perón.
Era para aquella Argentina, conducida por la oligarquía terrateniente y agro exportadora, un niño que nacía en el sur de la región pampeana y que con el correr de los años iba a cambiar la historia del Siglo XX en nuestro país. Geopolíticamente era el espacio donde convivían aborígenes, criollos e inmigrantes con grandes propietarios: estancieros ricos y trabajadores urbanos y rurales pobres.

La niñez de Juan Domingo se desarrolló en el marco de paisajes característicos del sur del país, por razones laborales de su padre. Luego se traslada a Bs. As. y comienza su educación.
Es el comienzo de la observación de dos modelos en un mismo territorio: la lucha por el sufragio secreto, obligatorio y universal, la lucha por la posesión de tierras de los pequeños y medianos productores sintetizada en el Grito de Alcorta santafesino, la lucha contra la corrupción y la dependencia de nuestra economía  a ingleses y norteamericanos, la lucha contra la explotación del trabajador urbano y rural y el analfabetismo proletario.

Su interés por estudiar medicina o ingeniería quedará postergado por el ingreso al Colegio Militar. El joven, desde su carrera de armas, será testigo, observador y un gran estudioso de los sucesos políticos, económicos y sociales argentinos, latinoamericanos y mundiales. Su viaje a Europa, lo sitúa en un momento clave de los movimientos de masas nacionalistas.
La participación en el GOU y el apoyo a la Revolución de Junio del ´43, sintetiza el compromiso y liderazgo del Coronel Perón en dar por terminado un modelo de concentración política y económica en las elites gobernantes del gobierno de la Década Infame y sus aliados extranjeros.

La Secretaría de Trabajo y Previsión Social se transformó de un oscuro Departamento de Estado, en el epicentro de las reivindicaciones políticas, económicas y sociales de los trabajadores argentinos a través de la dinámica impuesta por el joven coronel.
El terremoto de San Juan provoca una acción solidaria  del Gobierno nacional y el primer contacto con Eva Duarte, marcando el nacimiento de una relación de amor, lucha, compromiso y coraje.

Separado de su cargo por las presiones de los militares liberales y los sectores concentrados de poder, preso en Martín García, una movilización popular sin precedentes, llen{o la Plaza de Mayo, frente a la Casa de Gobierno, reclamando su liberación y su presencia.
El 17 de octubre es el día que los trabajadores irrumpen en la política nacional y el momento en que el coronel Perón se transforma en el “primer trabajador” y líder de los sectores populares, iniciando el camino que lo llevará a su primera presidencia.

La nueva organización conducida por Juan Domingo Perón y acompañada por la fuerza y la juventud de Evita, triunfa sobre la vieja estructura que se aglutina en la Unión Democrática, coalición de partidos que cuentan con el apoyo de la Sociedad Rural, la Unión Industrial y del embajador norteamericano Spruille Braden.
Es el comienzo de una nueva nación, una nueva forma de hacer política, donde el Estado asume un verdadero  protagonismo en el diseño político, económico y social. Esto se traduce en el paso de una economía agroexportadora dependiente a una economía planificada, con desarrollo agrario e industrial, con servicios públicos nacionalizados, con explotación de los recursos naturales y energéticos, con la creación de leyes  y tribunales obreros, con la creación de escuelas, hospitales y universidades para los trabajadores, la reforma de la constitución como sustento jurídico de la nueva argentina incorporando el viejo texto liberal a la corriente del constitucionalismo social, el voto femenino para verdaderamente universalizar los derechos políticos, la realización de obras públicas a lo largo y lo ancho del territorio generando pleno empleo en una sociedad que imperativamente deseaba incluir a todos sus habitantes y dignificarlos con el trabajo. Una nación que fomenta el deporte, que crea espacios recreativos populares, colonias de vacaciones, reivindica el concepto del turismo social,  crea la ciudad de los niños como forma de exteriorizar la prioridad que estos tenían en el contexto nacional. Principios de solidaridad y cooperativismo. Obras que se sintetizan en los postulados de “soberanía política, independencia económica y justicia social”, sus principales hechos y realizaciones.

La reacción oligárquica y los cipayos nativos provocan el golpe fusilador del ´55. El pueblo fue víctima de la reacción antipopular. Desde los bombardeos a Plaza de mayo, el intento de asesinar a Perón hasta el golpe de septiembre del 55 se profundizó una brecha que luego se prolongó en el tiempo marcando a fuego el antiperonismo de los sectores reaccionarios. Pero ni  el decreto 4161 que prohibía mencionar a Perón y al Partido Peronista, ni el robo del cadáver de Evita por los militares acosados por su mito y permanencia en la conciencia popular, ni las persecuciones  y los fusilamientos, ni el exilio del Gral., pudieron terminar con la lucha, dando a luz  la Resistencia Peronista.

Los años de ostracismo del conductor terminan a principios de los ´70. Su retorno, el comienzo de su tercera presidencia y la fuerte movilización y politización de la sociedad, provocaron el resurgimiento del Proyecto Nacional y Popular de Liberación, expresada en el abrazo con Ricardo Balbín, el recupero del salario real, el alto nivel de empleo, la latinoamericanización del peronismo y el apoyo del 60% de los argentinos.
El 1° de Julio de 1974 el pueblo, en forma multitudinaria, despide y llora la muerte del líder, del “Hombre del Destino”. Un tiempo histórico se cerraba.

Hoy, a 115 años del natalicio de Juan Domingo Perón, como protagonistas de nuestro presente, como integrantes del proyecto nacional y popular que se gestara a partir del 25 de mayo del año 2003 y que hoy coloca nuevamente a nuestra Nación de pie, reafirmamos las banderas y el carácter identitario de la filosofía esperanzadora, revolucionaria, emancipatoria, latinoamericanista y solidaria, creada por el General y  que perdura en nuestros corazones y la memoria del pueblo argentino.

Concepción del Uruguay, Entre Ríos, 8 de octubre de 2010.-